Los hechos sucedieron en la vereda Los Pozos, en San Vicente del Caguán, en el complejo de la empresa petrolera Emeralg Energy que fue incendiada.
El subintendente de la Policía, Ricardo Arley Monroy Prieto, fue asesinado por los manifestantes que lo degollaron con arma blanca, con la que lo hirieron también en la cabeza. Estaba casado y era padre de dos niños de 9 años y 3 meses.
«Desconcierta la manera salvaje con la que acabaron la vida del señor subintendente Ricardo Arley Monroy Prieto, cuando protegía a personas atemorizadas por la arremetida de una jauría que privilegió el caos sobre el diálogo», expresó el director de la Policía, general Henry Sanabria, en un trino que inexplicablemente eliminó.
Los indígenas y campesinos dejaron expuesto el cuerpo del uniformado en el suelo varias horas junto a sus 78 compañeros y 10 civiles secuestrados.
En el enfrentamiento de los manifestantes con los uniformados también murió un civil.
En un audio de 27 segundos, que ha circulado en redes sociales, se escucha el llamado angustioso de un policía a uno de sus superiores: «Mi general, Dios y Patria, mi general, ¿qué pasa?, ¡un apoyo! Dos horas aguantando, mi general. Dos horas, mi general. Tengo un compañero gravemente herido, mi general (…) ¿qué pasa? El Ejército no sirve para un culo. Tienen que mandar el Encar (grupo de carabineros) que nos apoyen (…) dos horas esperando un helicóptero…».
A las 11:17 de la mañana de este jueves el presidente Gustavo Petro trinó: “En este momento está saliendo una comisión del Ministerio de Defensa, Ministerio del Interior y las Fuerzas Militares para atender la situación de Pozos en San Vicente del Caguán. He ordenado detener los hechos de violencia”.
Los indígenas y campesinos reclaman supuestos derechos territoriales y exigen indemnizaciones económicas a Emerald Energy.
Los manifestantes se identifican como integrantes de la “Asociación Campesina Ambiental Losada”. Al parecer, tienen apoyo armado de las disidencias de las Farc.
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