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Los hechos violentos en el departamento de Nariño parecen no dar tregua en los últimos días y, luego del lamentable homicidio de 8 jóvenes en Samaniego este fin de semana, el gobernador Jhon Rojas denunció este martes una nueva masacre de indígenas AWA en el municipio de Ricaurte. Según la información preliminar que confirmó el alcalde de la población Eder Burgos, las víctimas serían 3 miembros de la comunidad AWA, asentada en el resguardo Pialapi – Pueblo Viejo, aunque otras versiones afirman que la cifra de la masacre podría aumentar a 12 muertos. Sin embargo, la comisión que se desplaza al lugar está a la espera de confirmar los detalles sobre este nuevo hecho ocurrido en una zona que se encuentra a 9 horas del casco urbano y donde se llega solamente a pie. «Los nariñenses reiteramos el llamado al Presidente de la República y a la comunidad internacional para que se preste atención inmediata a la difícil situación que se vive en Nariño. Necesitamos presencia integral del Estado para que vuelva la paz a nuestro territorio; Nariño no quiere más muerte y violencia», manifestó el Gobernador Jhon Rojas a través de un comunicado. Además, Rojas hizo un llamado a revisar la implementación de los acuerdos de paz, pues advirtió que mientras se firmó el acuerdo y pasaron los primeros años de su implementación, «la paz llegó a la población», aunque ha ido desapareciendo en los últimos años. «Nos informan oficialmente de la muerte de 3 compañeros indígenas en la comunidad denominada el aguacate (…) Nos preocupa la situación que viene afectando a estas comunidades por la intensificación del conflicto, la confrontación y las muertes violentas, por las cuales estamos siendo afectados», aseguró el alcalde Burgos del municipio de Ricaurte, quien también hizo un llamado al Gobierno Nacional para solicitar ayuda en medio de la ola invernal que ha dejado afectaciones a varias familias del sector. Por ahora es poca la información que están confirmada sobre esta nueva masacre en Nariño y tras la llegada de la comisión encargada, se espera que nuevos detalles sean revelados. «La situación de violación de Derechos Humanos en la región y en especial los asesinatos contra la población civil, son un problema muy delicado, que amerita la intervención integral del Gobierno Nacional para la garantía de derechos fundamentales y el desarrollo de políticas públicas que permitan erradicar la violencia generada por aspectos como el narcotráfico y la presencia de grupos armados», concluyó la Gobernación del Nariño. |