Con el fin de incentivar el amor por la cultura llanera en los niños y la salvaguardia de los cantos de trabajo de llano en el municipio; la Administración Municipal, en cabeza del alcalde Luis Eduardo Castro, propició que 46 estudiantes de colegios oficiales de Yopal, acompañados por integrantes del cuerpo docente, vivieran una semana en la finca ecoturística El Paraíso del corregimiento de Quebradaseca, realizando actividades y compartiendo experiencias con portadores de saberes de la región.
Este proceso de apropiación, valoración y sensibilización de la idiosincrasia llanera y los cantos de trabajo de llano como referente de nuestro patrimonio cultural, se desarrolló gracias al programa “Del Aula de Clase al Fundo Llanero”, liderado por el Instituto de Cultura y Turismo de Yopal ICTY, en alianza con la Fundación El Cabrestero, y apoyado por el Ministerio de Cultura a través del Programa Nacional de Concertación Cultural.
Durante 15 jornadas con estudiantes de las instituciones educativas Jorge Eliecer Gaitán de Yopal, Divino Salvador del corregimiento La Niata y La Inmaculada del corregimiento de Tilodirán; niños entre los 8 y los 15 años conocieron sobre el trabajo de llano, la gastronomía y cocinas tradicionales llaneras, los saberes y oficios relacionados a los cantos de trabajo de llano y la vida en el fundo, las especies de flora y fauna del ecosistema de los llanos; así como las faenas de ordeño, cantos de vaquería y la identificación de la vivienda llanera. La práctica de estas actividades, se realizó siempre de la mano de los portadores y sabedores de la región.
A su vez, los estudiantes estuvieron acompañados por docentes de las distintas instituciones, quienes agradecieron esta iniciativa para ayudar al proceso identitario de la cultura llanera, que cada vez es más complejo en la población infantil y juvenil.
Los relatos“Los estudiantes, docentes y la comunidad en general que hemos disfrutado esta finca, hemos tenido la oportunidad de aprender vivencias llaneras, conocer la cultura y sobre todo, lo que comprende el medio ambiente de la Orinoquia colombiana. Esto sirve para inculcarles a los niños a amar su cultura y cultivar valores que ayuden a cuidar nuestro medio ambiente”, expresó la licenciada Isaura Silva Carrillo, del colegio Jorge Eliécer Gaitán.
Por su parte, los alumnos también manifestaron su entusiasmo por pasar de sus pupitres, a vivir como verdaderos vaqueros, lo que ayudará a mantener viva la historia y las tradiciones, para que sean ellos mismos quienes transmitan estos conocimientos de generación en generación.
“Nos enseñaron a ordeñar vacas, ensillar los caballos, nos mostraron las canoas y los cuernos para llamar al ganado; me pareció bien salir de la ciudad y venir al campo”: Joseph Vallejo, estudiante del colegio Jorge Eliécer Gaitán. “Me gustó mucho aprender sobre trabajo de llano, montar a caballo y enlazar el ganado. Lo que más me gustó fue conocer sobre la flora y fauna. Fue muy chévere aprender cosas del llano que no sabíamos”: Mauricio Valero, estudiante del colegio La Inmaculada de Tilodirán. “Aprendí a hacer nudos, montar a caballo y ordeñar.
Los animales que conocimos eran muy lindos y los señores que nos enseñaron son muy buena gente. También me gustó acariciar los becerros y cantar las coplas”: “Vanesa Muñoz, estudiante del colegio La Inmaculada de Tilodirán. Fortaleciendo la identidad llanera Consciente de las dinámicas sociales, culturales y económicas que se han vivido en las últimas décadas en el territorio, que han ocasionado que cada día los niños y jóvenes presentan menos interés por el patrimonio cultural, el alcalde Luis Eduardo Castro ha buscado a través del Instituto de Cultura y Turismo ICTY, la creación de espacios que permitan el aprendizaje y el intercambio de saberes. “
Desde que fue creado el Instituto gracias al alcalde Luis Eduardo Castro, nuestro propósito ha sido el de fomentar todas las manifestaciones, pero sobre todo incentivar la tradición llanera. Esta es la gran motivación de este proyecto, al cual agradecemos a la licenciada Hilda Rojas de la Fundación El Cabrestero, quien propuso que los niños vivieran esta experiencia por sí mismos, para que supieran por qué amamos tanto nuestra cultura”, expresó la directora del ICTY, Sofía Rodríguez Múnera.
De igual modo, el concejal Giovany Cojo, manifestó la importancia de este programa para impactar positivamente a los niños, “Gracias a esa iniciativa podremos preservar las vivencias de nuestros ancestros, ya que los jóvenes viven en persona las faenas que se viven en el llano. Hay que agradecerle al alcalde porque ha demostrado mucho amor por nuestro corregimiento de Quebradaseca y por los niños de diferentes sectores. Además, estos espacios ayudan a que los niños se alejen de los flagelos y los malos hábitos.