El proceso de elección del director de la Corporación Autónoma Regional de la Orinoquia (Corporinoquia) está en su etapa final. Inicialmente, se consideraron 43 candidatos, pero tras un riguroso proceso de selección, se ha reducido a 35 hojas de vida que serán evaluadas por el Consejo Directivo de la entidad encargada de la administración de los recursos naturales en cinco departamentos de la región llanera.
Este proceso ha estado envuelto en controversias, ya que, según lo establece la ley, la elección recae en quienes seleccionaron a la actual directora, Doris Bernal. Esta situación fue objeto de demandas, pero finalmente se resolvió, permitiendo que la candidata respaldada por el exgobernador y actual Senador Alirio Barrera pudiera competir por el cargo.
A pesar de que la actual directora cuenta con el respaldo de quienes la eligieron y aún ocupan cargos en el gobierno, entre los 35 candidatos habilitados se encuentran algunos que aseguran contar con el respaldo de nueve gobernadores y alcaldes en total, lo cual podría ser determinante para su elección.
En relación a la posible inhabilidad de la directora actual, Maribel Cely, secretaria privada de la Gobernación de Casanare y miembro del comité de elección, anunció que, tras una detallada consulta y un análisis jurídico exhaustivo, se determinó que Bernal no ha incurrido en ninguna falta que la inhabilite para ser reelegida y asumir un nuevo periodo de cuatro años al frente de Corporinoquia.
Cely también aclaró que, ante la posible inhabilidad de Doris Bernal, se ha consultado a la función pública para que evalúe el caso y brinde asesoramiento al Consejo Directivo. Además, se cuenta con un equipo de cinco abogados expertos que están disponibles para proporcionar orientación jurídica en todo el proceso, asegurando que todo se lleve a cabo conforme a la ley.
La funcionaria, designada por el gobernador de Casanare, reafirmó que de las 43 hojas de vida inicialmente postuladas, ocho fueron descalificadas, dejando a 35 candidatos en la contienda por la dirección de Corporinoquia.
Por: Miguel Arango Devia